It was in the silence that I heard Your voice
Silence, 2016, Dir. Martin Scorsese
Silence, 2016, Dir. Martin Scorsese
Cuando tu vecina pone horrible música pop a alto volumen desde la mañana hasta la tarde uno empieza a valorar en verdad el silencio. Uno se da cuenta de que el silencio es un lujo que pocos se pueden dar en estos tiempos donde el ruido extiende su imperio por todas partes. Nos levantamos en la mañana con el ruido de nuestro celular y a partir de ahí nuestro día en un desfile de sonidos molestos. El ruido del tráfico, la música (mala música por lo general) que se escucha en el transporte público, el ruido las oficinas, el teléfono, la fotocopiadora, la computadora, al regresar más ruido en las calles, gritos, palabrerías, discusiones, el sonido del motor de los autos, más música mala en el transporte publico. En nuestras casas siempre tenemos encendido el televisor o la radio para no sentirnos solos. Nos olvidamos del silencio. Nos asusta el silencio.
Pero el silencio es necesario. Sé que el silencio absoluto no existe. Siempre hay algo que podremos escuchar. Pero darnos el tiempo necesario para estar un tiempo a solas, apagar las luces, aislarnos lo más que podamos del ruido del mundo, es algo que todos debemos hacer de vez en cuando. Verán que es como un oasis de descanso de la vida cotidiana. En estos tiempos vemos el silencio como algo negativo, lo asociamos con la soledad, con la tristeza, con la pérdida de tiempo y con lo aburrido. En nuestros tiempos queremos lo contrario, queremos los sonidos fuertes ya que los asociamos a la compañía, a la alegría, a una vida activa y productiva y a la diversión. Pero en el pasado se sabía del placer que el silencio puede otorgar. El silencio de los bosques, el silencio de la noche, el silencio de un santuario, ese silencio que nos hace escucharnos a nosotros mismos. El silencio es esencial para el misticismo, para la reflexión, para la meditación, la contemplación y además es un gran estimulante para la creatividad. De vez en cuando debemos poner un stop a la vorágine cotidiana y ponernos a escuchar el silencio.
En la música el silencio también es esencial. Sin él la música sería una serie de ruidos continuos sin ningún valor estético. Al igual que los sonidos, los silencios en la música también tienen la capacidad de conmovernos, de acelerar nuestro corazón, y de afectar nuestro estado de ánimo. Para cuando estén cansados de los ruidos del mundo y quieran tomarse un respiro, hice un pequeño listado de música, de canciones con sonidos suaves y sutiles que pueden ayudarlos a adentrarse poco a poco en el placer del silencio.
Johann Sebastian Bach compuso las Variaciones Goldberg en 1741, al parecer su nombre se debe a que fue un discípulo de Bach, Johann Goldberg su primer intérprete. Originalmente fueron compuestas para el clavecín, un instrumento de teclado y cuerdas muy usado en la época barroca, podría decirse que era el abuelo del piano. Esta versión que hizo el pianista canadiense Glenn Gould (1932-1982) ejemplifica perfectamente como los silencios pueden ser tan poderosamente conmovedores como los sonidos.
Se podría considerar al músico francés Erik Satie (1866- 1925) el padre de la música ambiental y minimalista. Su objetivo era crear una música que se pudiera escuchar mientras se conversaba con alguien, una música que estuviera ahí pero que se notara poco. Creo que su música es ideal para una conversación interior. Esta pieza pertenece a las Gymnopédies, composiciones para piano publicadas en 1888.
Del disco de 1959 Ben Webster meets Oscar Peterson tenemos la canción Whe your lover has gone, una de esas piezas de jazz donde el saxofón y el piano se conjuntan para darnos una experiencia sublime, una música perfecta para acompañar esas noches silenciosas. Los sentimientos y los recuerdos nos invadirán gracias a estos dos grandes músicos, Beb Webster (1909- 1973) en el sax y Oscar Peterson (1925-2007) en el piano.
Julia Holter es una artista estadounidense nacida en 1984, su estilo de música se encuentra dentro del art pop y la música ambiental. En su disco del 2013 Loud City Song se encuentra la canción Hello Stranger. Esta canción empieza con sonidos ambientales que luego dan paso a la música y la voz de Julia. A pesar del título este disco es todo lo contrario a lo que podemos oír en nuestras ruidosas ciudades modernas.
Max Richter es uno de los compositores más activos de nuestros tiempos, principalmente por su labor en la composición de bandas sonoras para películas. Su estilo es muy característico y es muy fácil de identificar sus obras una vez que lo conocemos. Música minimalista de piano y violín que se sobreponen sobre un lienzo musical donde en ocasiones recurre incluso a la electrónica. Su disco Songs from before salió en el 2014 a través de Deutsche Grammophon, el sello de música clásica más famoso del mundo.
Max Richter es uno de los compositores más activos de nuestros tiempos, principalmente por su labor en la composición de bandas sonoras para películas. Su estilo es muy característico y es muy fácil de identificar sus obras una vez que lo conocemos. Música minimalista de piano y violín que se sobreponen sobre un lienzo musical donde en ocasiones recurre incluso a la electrónica. Su disco Songs from before salió en el 2014 a través de Deutsche Grammophon, el sello de música clásica más famoso del mundo.
¿Hay lugar en tu corazón para un hombre como yo? El disco del año 2017 de Ron Miles I am a man esta lleno de tenues sonidos que son bienvenidos en momento de introspección y relajamiento. Sus sonidos suaves y rítmicos hacen que todo ese ruido del exterior se aparte. Este disco es una muestra que el buen jazz aún es posible en nuestros tiempos.
Y bueno, no se puede terminar una playlist sobre el silencio sin poner Enjoy the silence de Depeche Mode. Un tema clásico del álbum Violator de 1990 que aunque no es muy "silencioso" y contrasta mucho con los otros temas, no se puede dejar de lado. Recuerden, tómense un tiempo de vez en cuando para disfrutar del silencio y ya pueden volver a subir el volumen de sus equipos de sonido.
_Franco
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